EL DIPLOMA
El padre llama al nieto ─ ¡Diploma, ven acá!
Si abuelito ─ contesta el niño.
Un amigo le pregunta; ─ Oiga don Cande, ¿porqué le llama así al niño?
Don Cande responde ─ Es que mandé a mi hija a estudiar a la capital y me ofreció traerme un diploma…y este niño me trajo.
UN “MONUMENTO”
Un amigo le dice a otro: fijate vos que ayer me encontré con una chica, que; ¡vieras que monumento! ¡Qué busto! ¡Qué caderas! ¡Que piernas...!
¿Ah sí?─ pregunta el otro ─ ¿y de cara qué tal…?
Pues hombre…─ contesta el primero ─ ¡Vas a creer que no me fijé!